Padre Paisos Olaru

Busca devotamente las virtudes, las más valiosas y las más fáciles de obtener, como el amor, la oración, la piedad y la humildad.

Todo lo que hagas, hazlo con amor, y tus actos serán recompensados. El amor es la corona de todas las virtudes. En verdad, la última, la más grande virtud de quienes creen en Cristo Resucitado, es el amor cristiano, es decir, amar todo lo creado por Dios, sin hacer diferencias. Por el Señor y por la salvación, el amor soporta todo.

El amor espritual vence al dolor. En consecuencia, hermano, practica el amor y la paz ahora, cuando todavía puedes, porque cuando tu conciencia te reprenda será ya demasiado tarde. El tiempo pasa y es imposible volver atrás. Por eso, busca devotamente las virtudes, las más valiosas y las más fáciles de obtener, como el amor, la oración, la piedad y la humildad. Aprende a aceptar serenamente y con alegría todo lo que venga a ti: la enfermedad, los insultos y las tentaciones. No importa de dónde vengan, tú acéptalo todo. Y no culpes a nadie, solamente a ti mismo. No olvides que el enfriamiento del amor y la disminución del fervor por las cosas sagradas, especialmente las que tienen que ver con la asistencia a los oficios litúrgicos, es una señal de nuestro vacío interior.

Fuente: doxologìa.org

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